Ah, la ausencia
ese terrible desecho
de inagotables horas

esa innoble estela
de alusión a la muerte.

yo conozco esta lluvia
llanto de sur y lástimas
los sueños que se encharcan
apocalipsis mínimo *






* M. Benedetti

¨ Eres el sol que me sube a la cabeza
cuando estoy seguro de mí ¨
Paul Éluard.


Has venido a remozar cada aspecto
Cada delusión de aceptarse por el mundo
Andando solo y hábilmente.
Has venido substancial
-Paraje en que el insomnio es útil-
Con tus ojos negros
Con tu cuerpo fuerte


He visto quebrarse el alba

y aunar sus fragmentos

En el centro de una voz

He desgarrado yo misma

sus ataduras y pliegues

He ofertado mi propia luz

en la cúspide nocturna

Para ver llenarse el mundo

de coloraciones esplendentes

Para ver si acaso

a pesar de la noche

algo podía hacer yo

De modo que esa voz,

esa emisión rotunda

Se originase y expandiese.


Lo que he podido ha resultado este silencio.

Con las formas

de las letras

de algo que tenga que enunciar

de esta búsqueda

y la fiebre de la noche


cada curvatura ceñirá

una parte de tu cuerpo

solo por si un día

mi abrazo no te alcanza.



Cada mañana escarbo el rastro
- la maravillosa estampa -
de tu abrazo en mi memoria.






.




Allí donde la ventisca oceánica
recibe en ofrenda a los cuerpos amantes
cae el silencio muy dentro de los ojos
y ya dentro
tras el umbral de las pupilas
pronuncia el gesto de la creación.